La historia empieza en la primavera de
1941 cuando conocemos en un bar de Berlín a los protagonistas de la
miniserie: un grupo de cinco amigos con poco más de 20 años que aparecen en el primer capítulo despidiéndose entre ellos. Dos de ellos son Wilhelm y Friedhelm Winter,
soldados de la Wermacht, listos para ir al frente oriental contra
Rusia. Wilhelm ya ha participado en las ofensivas de Francia y
Polonia. Por su parte Friedhelm se ha alistado solo por ganar valor a
los ojos del padre y está en contra de la guerra. También
Charlie, una de las dos chicas, está a punto de dejar Berlín para
ir al frente oriental como enfermera voluntaria. Los últimos dos son
Greta, que sueña con ser cantante y su novio Viktor, alemán judío.
Los cinco son optimistas y confían en volver a verse en las próximas Navidades, ya que están convencidos de que la guerra no durará más de unos meses. Lo que ninguno de ellos sabe es que a partir de aquel momento sus vidas cambiarán por completo.
Los cinco son optimistas y confían en volver a verse en las próximas Navidades, ya que están convencidos de que la guerra no durará más de unos meses. Lo que ninguno de ellos sabe es que a partir de aquel momento sus vidas cambiarán por completo.
Durante los tres capítulos que dura la serie, se nos muestra la guerra desde 1941 hasta su fin a través de los
ojos e historias de los protagonistas. Veremos cómo sus ideas
sobre el conflicto, lo que esperaban de él, la “victoria
final”, las ideas y las intenciones de Hitler, irán cambiando a lo
largo de la historia y de los eventos. A pesar de ser una serie sobre un
argumento tratado ya en otras muchas, y que se parece a
muchas de ellas en época y escenografía (recordamos sobre todo
“Hermanos de sangre” y “The Pacific”), destaca en el panorama
de las series bélicas de la Segunda Guerra Mundial por mostrarnos el
conflicto desde el lado alemán.
La intención de los productores ha
sido la de poder reconstruir un diálogo entre las generaciones alemanas que
han vivido los años del conflicto y las sucesivas. Un dialogo que ha
sido evitado y ocultado sistemáticamente por suponer para muchos alemanes, la vergüenza de tener que enfrentarse con la posibilidad
de que sus propios padres o familiares fueran directa o
indirectamente culpables (este el significado del título de la
serie).
La serie nos enseña una realidad que
ni estamos acostumbrados a ver ni muchos nos esperamos: la realidad y
la posición de muchos alemanes durante la guerra. ‘Hijos del
Tercer Reich’ nos presenta a un variopinto grupo de personajes: el
soldado nazista convencido, el patriota, el soldado por obligación y
no por elección, el alemán judío que a pesar de las leyes raciales
sigue confiando y creyendo en su país y su gobierno, y más aún.
El intento de reflejar la diversidad de opiniones políticas y bélicas entre los personajes se hace con la intención de demostrar la existencia de muchos tipos de soldados alemanes distintos. Por una parte existieron muchos que no compartían los valores que predicaba el Reich pero que se vieron en muchas ocasiones obligados a acatar las decisiones de Hitler. Por otra, también existieron soldados alemanes que ni siquiera se cuestionaron si las órdenes eran humanas, simplemente obedecían como 'burros' y acataban las órdenes de sus superiores cual simples peones de un tablero de ajedrez.
La serie es muy buena y emotiva, me
ha gustado mucho la perspectiva que ha querido mostrar ya que no es la comúnmente vista en películas y series sobre la Segunda Guerra Mundial. No
obstante, estoy de acuerdo con algunas críticas que ha recibido
sobre cómo ha ignorado (u ocultado) el tema del Holocausto, que es
mencionado solo a través de detalles que no son parte de la historia
y trama principal.
Además, las pocas escenas que hay sobre la persecución de los judíos nos muestran como esta es llevada a cabo principalmente por ucranianos, partisanos polacos y algunos soldados nazis de forma individual, casi queriendo alejar las responsabilidades de los soldados alemanes, a quienes se les llega a presentar como perturbados al verlos en acción. Este detalle ha recibido muchas críticas por el hecho de representar a otros grupos como más antisemitas que a los soldados alemanes y a mí, sinceramente, aunque esté segura de que muchos militares no compartían la idea antisemita o que ni siquiera estaban enterados de lo que pasaba con los judíos, me ha parecido un intento de “santificación” de los alemanes fuera de lugar considerando la magnitud de la tragedia del Holocausto.
Concluyo diciendo que a pesar de este defecto, la serie me ha encantado y la aconsejo a todos los interesados en el tema bélico que quieran conocer más sobre la Segunda Guerra Mundial pero desde una perspectiva diferente
a la de los ganadores del conflicto.
Publicación escrita íntegramente por la colaboradora del blog Chiara Sedran.
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