Salem conocida también como la “ciudad
de las brujas”, por la caza de brujas que tuvo lugar en 1692 es aún hoy una ciudad marcada inevitablemente por lo que pasó hace siglos.
Todo empezó en 1692 cuando la hija
del reverendo Parris cayó enferma y el doctor Griggs, al no encontrar ningún remedio médico que explicase los síntomas de la niña (caminar a cuatro patas, ladrar,
etc.), formuló por primera vez la hipótesis de que pudiera ser brujería. Poco tiempo después de este primer caso, otras seis chicas de Salem
empezaron a presentar los mismos síntomas y todo el pueblo empezó a
preguntarse quién podía haberlas hechizado. Según el
reverendo Parris, en Salem vivían mujeres que practicaban brujería
y tenían una conexión con el infierno entre las cuales, siempre
según él, estaba la niñera de Betty, Tituba.
Como en aquella época la ley regía que
la brujería era delito y debía ser castigada obligatoria e ineludiblemente mediante ahorcamiento, tanto las chicas que
confesaban como las que no, morían en la horca bajo un roble al igual que lo hacían algunos hombres acusados de ser “jefes de
brujas” o de protegerlas.
La forma de comprobar si una mujer
era bruja o no, era terrible. Las sospechosas de
ser brujas eran lanzadas por un precipicio o río y sólo si no volaban en una escoba o se ahogaban, eran inocentes. Muertas pero inocentes. Poco importaba eso en aquella época a los habitantes de Salem.
Se organizó un tribunal presidido por
magistrados de Massachussets y llamaron para prestar declaración a las
chicas trastornadas Betty Parris, Abigail Williams,
Elizabeth Hubbard y Ann Putnam. Escuchadas sus declaraciones el tribunal acusó de brujería a la niñera Tituba, Sarah Good (una persona sin hogar) y Sarah Osborne (una mujer que llevaba más de un año sin entrar en una iglesia).
Solo la niñera Tituba, quien según el reverendo y las chicas, había sido
sorprendida más veces conversando con una misteriosa sombra que
creían era el demonio, confesó ser
una verdadera bruja y tener contactos con el diablo. Confesión que al mismo tiempo que le salvó la vida, terminó por convencer aún
más a los habitantes de Salem de que entre ellos vivían brujas.
Consecuencia de esta histeria del pueblo, se acusaron e internaron más personas. La primera en morir ahorcada en Gallows Hill fue la dueña de una taberna Bridget
Bishop, acusada de ser bruja,
practicar magia negra, seducir a hombres de Salem e intentar poseer a chicas.
En semanas y
meses siguientes, las acusadas debían responder forzosamente en el tribunal ante las chicas a las que ellas se creía que habían poseído porque existía la convicción de que si al escuchar sus
voces, las chicas presentaban síntomas de posesión (desmayos, crisis histéricas etc), estos síntomas demostraban a magistrados que
eran culpables (prueba espectral). Este tipo de pruebas fue posteriormente muy criticada ya que los testigos podían acusar a quien querían e incluso influenciar las decisiones de los jueces.
Fueron
acusados también personajes influyentes de la sociedad de Salem.
Documentos de la época testimonian que murieron acusadas de
brujería, 19 personas ahorcadas, uno bajo tortura y cuatro en
prisión. La mayoría de ellos tenía una buena posición y
reputación social. Algunos ejemplos de esto fueron:
-Rebecca Nurse, una madre
muy querida en Salem que nada pudo contra las acusaciones de Abigail
Williams.
-El reverendo George Borroughs, ahorcado mientras recitaba
sus oraciones, cosa impensable para alguien poseído por el demonio.
-Giles Corey, un granjero de 70 años, acusado de brujería por Mercy
Lewis que contó ser perseguida por su espíritu pervertido y
blasfemo.
Giles Corey fue el primer y único que se negó a confesar su culpabilidad guardando silencio
durante el juicio. Como este silencio provocaba que las chicas poseídas que le debían escuchar no pudieran reaccionar de ninguna forma, nadie habría
podido comprobar si era realmente culpable o no y el proceso se
habría suspendido. El sheriff George Corwin intentando sacarle una confesión, lo torturó tumbándolo en el suelo y
cargándolo de piedras, pero tampoco eso funcionó. Corey murió a
los dos días, guardando silencio y no sin antes maldecir al sheriff y a sus sucesores en Salem. Cuatro años después de la ejecución,
Corwin murió por un infarto y una hemorragia.
En 1970 el
sheriff Robert Cahill tuvo que dejar su trabajo por problemas
cardiacos y decidió indagar sobre los sheriffs de Salem,
descubriendo que todos, desde Corwin hasta él, habían muerto o
tenido problemas cardiacos que los obligaron a dejar el
trabajo. La maldición se acabó en 1991 cuando la oficina del
sheriff se trasladó a otro pueblo.
Los procesos en Salem se acabaron en
octubre de 1692 cuando una ley subrayó que la prueba
espectral no era justa y podía llevar a la ejecución a inocentes.
Las ultimas ejecuciones fueron el 22 de
septiembre y en enero de 1693 las personas que estaban detenidas por
brujería fueron liberadas. Acabadas las ejecuciones, durante siglos todos se
preguntaron qué había pasado realmente en Salem y fue así como comenzaron a surgir posibles explicaciones para esta pregunta.
Algunas explicaciones dicen que existieron realmente las brujas en Salem. Otras aseguran que Abigail Williams fue una bruja y que, para protegerse a ella y a sus amigas, empezó a acusar a las mujeres de Salem
para alejar las sospechas.
Otras explicaciones posibles de
la histeria de Salem es que las chicas, aburridas y rebeldes,
se adentraron en el tema de las posesiones y acabaron por sí mismas sugestionándose.
También se usó como explicación los
problemas entre familias que había en Salem. Las familias de dos de
las chicas poseída, los Parris y los Putnam, eran dos de las más importantes de la ciudad, y casualmente la gran mayoría
de los acusados de brujería eran miembros de familias contrarias a los Parris, Putnam o magistrados del tribunal.
El uso
de LSD es la última de las posibles explicaciones de lo que pasó en
Salem en 1692. Un estudio de 1970 demostró como los síntomas de las
chicas eran compatibles con los causados por una intoxicación de
LSD.
Quien visita Salem sigue percibiendo hoy en día una
atmósfera muy diferente a la que se vive en los demás pueblos ya que los hechos y la historia de Salem aún hoy influyen y sugestionan a quien lo visita hasta el punto de que incluso hay quienes aseguran haber visto el fantasma de Giles
Corey pasear por el cementerio de la ciudad.
Una noche de 1914 se vio el fantasma y en
el mismo año un incendio que empezó en Gallow Hills (sitio donde se ahorcaban a las brujas) y se expandió por la
ciudad. Gallow Hills es otro lugar que está lleno de actividad
paranormal: gritos, apariciones y lamentos son cuentos comunes entre
quien ha estado allí. En el actual restaurante que se encuentra
donde una vez estaba la taberna de Bridget Bishop, los trabajadores
aseguran haber visto su espectro vagar por la taberna.
Publicación escrita íntegramente por la colaboradora del blog Chiara Sedran.